*Narra Grimmjow*
Sentí algo extraño y fuí a investigar. Me encontré al Shinigami afro tirado en el suelo, malherido. El reiatsu de sus heridas se parecía al de Ichigo, pero éste era mucho más violento.
- Algo va mal - me dije a mí mismo -. Mejor no aviso a Ichigo hasta que tenga más información sobre esto.
Llamé a Urahara y le dije todo lo que había visto y sentido. Me hizo traerle al Shinigami. Curaron sus heridas.
- Esto no me gusta - me dijo Urahara -. El reiatsu de la persona que lo atacó...
- ... Se parece al de Ichigo, lo sé - le conteste.
- ¿Qué crees que significa?
- A lo mejor es otro de sus poderes que ha salido de su cuerpo. Pero, ¿Para qué atacaría a un Shinigami normal?
- También puede que sea un clon suyo que hizo Aizen que ahora ha despertado y quiere matar a Ichigo.
- Conociendo a Aizen es probable. Supongo que atacó al tío afro para que no dijera que aspecto tenía.
- Avisaré a Ishida y a Chad para que estén alerta. Tú ya avisarás a Orihime y a Neliel. Yo estaré investigando. Y no llames a Ichigo bajo ningún concepto. No le estropeemos las vacaciones.
- Está bien. Ya se lo diré a las chicas.
*Narra Ishida*
Llamaron a mi móvil. Contesté. Era Urahara.
- Ishida-San, tenemos un problema. Antes de contártelo debes prometerme que no le dirás nada a Kurosaki-San.
- ¿Tiene que ver con él?
- Aún no sabemos que és, pero tiene su reiatsu y probablemente quiera matarle. Ve con cuidado, sea lo que sea, ha atacado a Zennosuke.
- ¿El Shinigami que vigila Karakura?
- Sí. Si realmente quiere matar a Kurosaki-San, probablemente no estará solo y buscará información de la gente que hay a su alrededor. Cualquiera puede ser atacado en cualquier momento.
- Estaré alerta. Gracias por avisar.
- Tengo que avisar a Sado-San antes de que le pase algo.
- Entiendo. Se lo diré a Ryūken, a ver si podemos averiguar algo.
Fuí a hablar con Ryūken cuando Urahara colgó. Él también se había dado cuenta de que algo iba mal. Pero nos dimos cuenta demasiado tarde de que alguien nos estaba escuchando. Lo sentimos cuando terminamos de hablar. Llamé a Urahara para decirle que podían ocultar su reiatsu.
*Narra el tipo que atacó a Zennosuke*
- ¿Qué has descubierto? - le pregunté a mi cómplice cuando llegó.
- Al parecer, Kurosaki Ichigo está de vacaciones. Se ha ido a esquiar con su familia.
- ¿Qué haremos? - me preguntó mi otro cómplice -. Si no está, no podremos matarle.
- Muy fácil - les dije -. Entraremos en su casa y descubriremos más cosas sobre él antes de que vuelva.
*Narra Orihime*
Al amanecer todos vinieron a mi casa. Urahara había convocado una reunión para todos, incluso Zennosuke-San estaba allí.
- ¿Por qué esta reunión es aquí? - preguntó Ishida.
- Porque la reconstrucción del cuerpo de un Arrancar no se hace en un día - le contestó Urahara -. Y menos en su forma liberada.
- Eso es lo único que no me gusta. Ojalá no hubieran encontrado ningún trozo de ese Arrancar.
- Ishida - dijo Chad -, no seas tan violento.
- Es porque está celoso de Ulquiorra - le dijo Grimmjow -. Él quiere a Hime-Chan para él, pero ella ama a Ulquiorra.
- ¿Quién te ha dado permiso para llamarla "Hime-Chan"? - se quejó Ishida.
- Pues ella nos dió permiso.
Yo estaba en mi habitación con Nell y podía escuchar todo lo que decían. Allí era dónde estaba reconstruyendo a Ulquiorra.
- Ishida es muy celoso - me dijo Nell.
- Sí, ahora lo es mucho porque sabe que no le pertenezco.
- Tus poderes son realmente fenomenales.
- Me gustaría poder ir más rápido.
- En un mes y medio has regenerado casi todo su cuerpo. Sólo te faltan las alas.
- Hoy voy a empezar las alas y terminaré los pies.
- No te fuerces demasiado. Sabemos que te has pasado noches despierta.
-Sí. Lo siento.
- No te disculpes. Si quieres ya estaré yo despierta vigilando mientras tú duermes.
- Arigatou.
Fuimos con todos. Llegamos a tiempo. Ishida aún no había disparado una flecha que tenía preparada.
- Calmémonos todos - dijo Urahara. Todos nos sentamos en el suelo -. Bien, cómo ya sabeís, nos enfrentamos a un enemigo desconocido que tiene el reiatsu de Kurosaki-San. Gracias a la familia Ishida, he descubierto que pueden esconder su reiatsu. Tampoco dejan ningún tipo de rastro, así que las únicas pistas de reiatsu que tenemos vienen del cuerpo de Zennosuke-San.
- ¿De mi cuerpo? - preguntó Zennosuke.
- Exacto. De las heridas que te hicieron. Ahora, Zennosuke-San, dinos cómo era la persona que te atacó.
- No vi demasiado de él, se escondía en la oscuridad. Sólo vi esos brillantes ojos rojos. Incluso antes de caer desmayado.
- ¿Cómo sabes qué era un chico? - le preguntó Ryūken.
- Por el tipo de voz. Era un chico y tendría entre los 15 y los 20 años.
- ¿Hablaste con él? - le preguntó Chad.
- Me preguntó si sabía dónde vivía Kurosaki Ichigo y si sabía dónde estaba. También dijo que buscaría su casa por sí mismo. Lo dijo antes de atacarme.
- Sea quién sea - dijo Urahara -, querrá ver a Kurosaki-San muerto. Hay que ir con mucho cuidado.
- Grimmi - dijo Nell de repente -, ¿Qué te ocurre? Has estado cómo ausente todo el rato.
- Siento algo extraño viniendo de casa de Ichigo. No me gusta lo que estoy sintiendo. Creo que han llegado allí.
*Narra el tipo que atacó a Zennosuke*
Estábamos los tres en casa de Kurosaki Ichigo y habíamos descubierto algunas cosas. Parece que toda la familia quiere mucho a la difunta madre. Además de que podíamos amenazarle de matar a su familia si no hacía lo que le decíamos. Podíamos manipularlo un poco antes de matarlo.
- Hey - dijo uno de mis cómplices -, Kurosaki está prometido. Al parecer es una shinigami. Además, su Bankai, su hollow y el hollow de su prometida están libres por la casa.
- ¿Tensa...? No, ¿Su Bankai y sus hollows?
- Exacto. Parecen uno más en la familia según las fotos que hemos visto. Además, hemos encontrado un álbum secreto sellado con un sello Real. Alguien en esta casa quiere esconder algo.
- ¿Un sello Real? Vaya, parece que esto va a ser más interesante de lo que creía.
- ¿Quién está ahí? - dijo una voz de hombre detrás de nosotros.
- Eso deberíamos preguntar nosotros - dijo mi cómplice -. ¿Quién eres?
- Primero Espada, Coyote Starrk.
El tal Starrk encendió la luz. ¡Nos vió! Debíamos matarle.
- Vaya, un hollow interno y un tío con los ojos rojos y el pelo negro.
- ¿Qué pinta un Arrancar en casa de un Shinigami?
- Ichigo me protege. Hay cosas que unos mocosos como vosotros no sabeís.
Ataqué al Espada. Éste supo cómo pararme, pero no vió venir el Cero que mi cómplice le lanzó por la espalda.
- Eso no es leal - me dijo el Espada.
- ¿Enserio? No lo sabía. Nuestro objetivo es matar a Kurosaki Ichigo. No eres necesario y sabes demasiadas cosas.
Apuñalé al Espada por delante, mi cómplice por detrás y mi otro cómplice le atravesó el cuello.
- Está muerto - certificó mi otro cómplice -. ¿Ocultamos su cadáver?
- No - le dije -, no hay tiempo. Han notado nuestra pelea y vienen hacia aquí. Debemos irnos. Apagad la luz y dejad al Espada allí. Era bastante débil para ser el primero.
*Narra Grimmjow*
Llegamos a casa de Ichigo demasiado tarde. Esos tíos ya habían pasado por allí. Encontramos a Starrk muerto en el suelo. ¿Qué hacía él allí?
- ¿Qué es lo que ha pasado? - preguntó Orihime, mirando a su alrededor.
- No lo sé - dijo Neliel -. Grimmi, voy a mirar arriba.
- Vale, ve con cuidado - dije -. Parece que han estado revolviendo toda la casa.
- Iré arriba con Neliel-San - dijo Urahara -. Hay algo un poco desconcertante.
- ¿El qué? - le preguntó Chad.
- Es un poco raro que no se hayan llevado nada - dijo Ryūken.
- Puede que sí se hayan llevado algo - dijo Urahara.
- Hey - dijo Neliel bajando las escaleras -, falta un álbum de fotos que tenia un reiatsu extraño.
- ¿Se han llevado ese álbum? - dijo Urahara -. ¿Para qué lo querrán?
- ¿Qué contiene ese álbum? - le pregunté a Urahara.
- Contiene algunos secretos de Ichigo. Si consiguen quitarle el sello, podrán manipular a Ichigo cómo quieran.
- Puede que quieran obligarle a hacer según qué cosas antes de matarlo.
- Probablemente. Tendremos que resucitar a Starrk. Inoue-San... Tenemos que regresar a tu casa. Aún estás con Ulquiorra, ¿Verdad?
- Si - le respondió Orihime -, pero ya queda poco.
- ¿Podrás regenerar a Starrk mientras estás regenerando a Ulquiorra?
- Si, puedo hacerlo.
Llevamos a Starrk a casa de Inoue. Ella lo resucitó. A Ulquiorra solo le faltaban las alas. En realidad la mitad de las alas.
- Vaya, esta situación es algo incómoda - dijo Starrk al despertarse.
- ¿Qué coño hacías en casa de Ichigo? - le pregunté -. ¿No se supone que deberías estar en Hueco Mundo?
- Ichigo nos rescató de Hueco Mundo durante la Guerra de los 1000 años. Desde entonces hemos estado viviendo en su sótano.
- ¿Nos?
- A mí, a Harribel y su Fraccion y a Lilynette.
- Más importante - dijo Urahara -, ¿Cómo era ese hombre que te mató Starrk-San?
- Para empezar eran 3. Dos hollows internos y un tipo de ojos rojos y pelo negro. El pelinegro tenía un gran parecido con Ichigo. Los otros dos, uno era el hollow de un capitán, el otro casi no lo vi.
- Interesante...
- ¿Qué es tan interesante? - dije.
- Creo que conozco a uno de ellos. Derrotó a Aizen.
- ¿Pero ese no fue Ichigo?
- Es por eso que sabe quién es Ichigo. Es su ataque final.
- ¿Estás seguro de eso? - preguntó Ryūken.
- No del todo, pero estoy un 75% seguro de que es él. Starrk-San, lo mejor sería que tú, Harribel y los demás estuvierais fuera de vuestro escondite por si vuelven a aparecer.
- Entendido - dijo Starrk.
*Narra Orihime*
Todos volvieron a sus casas, así que me quedé sola con el cuerpo de Ulquiorra. Me quedé viendo la televisión porque no podía dormir. ¿Realmente el ataque final de Kurosaki-Kun quería matarlo? Pero, si lo hacía, ¿No moriría él también?
- Orihime... Digo, mujer, ¿Dónde estoy?
- Ulquiorra-Kun... - empecé a llorar -. Pensé que no volvería a verte... Que bien que estés vivo... Otra vez...
- Hime... ¿Tanto se preocupa por mí una simple humana?
Ulquiorra me abrazó, pero, ¿Por qué? Él siempre ha sido un Arrancar muy frío.
*Narra Ulquiorra*
La abracé por instinto, nada más. Ya la había visto llorar una vez por el hombre que ella ama y no quería volverla a ver llorar. Es cierto. Ella ama a Kurosaki Ichigo. La solté y salí de la casa. Ni siquiera escuché lo que me decía. Ahora estaba por las calles del mundo real, sin rumbo. No tenía dónde ir y volvía a estar solo.
- ¿Esa es la famosa segunda Ressurrección?
- ¡Grimmjow! - dije antes de girarme para comprobarlo.
- ¿A qué viene esa cara? ¿Te sorprende verme?
- Me sorprende verte con ese aspecto.
- ¿Te refieres al gigai? Nell también tiene uno y hay otro encargado para ti. ¿Has dejado a Hime-Chan sola? La pobre estará destrozada.
- Ella tiene a Kurosaki Ichigo. No me necesita.
- Ichigo se casará con Kuchiki Rukia dentro de un tiempo. Hime-Chan quiso resucitarte a ti porque sabía que la amabas.
- Esa mujer también tiene a ese Quincy.
- Rechazó a Ishida frente a todos los del Escuadrón Fantasma. Te quiere a ti.
- Mientes.
- Es la verdad. Yo y Nell fuimos con ella a Las Noches para buscar algún trozo tuyo. Sólo pudimos encontrar uno de tus cuernos y ella se ha pasado noches en vela para regenerar todo tu cuerpo. Hemos tenido que quedarnos unos días en su casa para vigilar que no se pusiera enferma. Lo hizo todo por ti. Vuelve allí y pídele perdón.
- ¿Quién eres tú para darme órdenes?
- No es una orden, es un consejo. Las órdenes serán buscarte si Ichigo vuelve y ella está destrozada. Él se preocupa mucho por sus amigos.
- No volveré. Está mejor sin mi.
- ¿Y esa mirada triste? Parece que Hime-Chan estaba en lo cierto cuando leyó tu rostro antes de que te convirtieras en polvo. Vuelve con ella. Yo tengo que volver con la cena antes de que Nell se preocupe. Nos vemos.
- ¿Qué es esa niña para ti?
- Dejo de ser una niña hace tiempo, cuando recuperó la memoria. Ahora es mi novia. Ve con ella y deja que cocine para ti aunque los ingredientes sean un poco raros.
Grimmjow se fue corriendo. Aún no me creo que alguien como él tenga novia.
Seguí caminando sin rumbo intentando recordar por qué calles había pasado.
- ¡Ulquiorra-San! - dijo una voz detrás de mi.
- ¿Quién eres?
- Es verdad, no me conoces. Mi nombre es Urahara Kisuke. Sólo soy el gerente de una tienda de dulces.
- Sí sólo tienes una tienda de dulces, ¿Cómo me conoces?
- Es muy sencillo. También vendo cosas de la Sociedad de las Almas y luché contra el Décimo Espada.
- ¿Contra Yammy?
- Exacto. También me encargo de fabricar gigais para el Escuadrón Fantasma. Tengo el tuyo, si te interesa. Fue un encargo de Inoue Orihime.
- Orihime... ¿Ella encargó uno para mí?
- Sí, lo hizo. Además, ¿No te has dado cuenta de qué eres un poco más humano? Ella ha hecho que los Arrancars que están en el mundo humano no sean detectados desde la Sociedad de las Almas a no ser que sus espadas estén liberadas. En tu caso, te estaran viendo. Le estaba llevando tu gigai a Inoue-San. ¿Quieres que te acompañe hasta su casa?
- Creo que me harías un favor.
Cuando llegamos Orihime me abrazó, llorando. Esta vez la abracé conscientemente. Quería abrazarla.
- Qué bonito es el amor, ¿Verdad? - dijo Urahara, mirándonos. Orihime sólo sonrió.
*Narra Ogichi*
Entré en el Mundo Interno de Ichigo con Tensa. Algo iba mal y tenía que saber qué era.
- Así que estabas en el Mundo Humano, Tensa - dijo Zangetsu cuando nos vió.
- Si... - le contestó Tensa escondiéndose detrás de mi.
Tenía muy claro lo que debía hacer, así que fui directamente allí. Fui al edificio dónde había nacido, por así decirlo, Tensa y entré. Había justo lo que había deducido.
- ¿Dónde está Mugetsu? - dijo Zangetsu detrás de mi -. Se supone que estaba sellado en esa pared.
- Es lo que me temía. Alguien lo ha liberado.
- ¿Eso es malo, Shiro? - me preguntó Tensa.
- Sí, muy malo. Se supone que su sello no se rompería a menos que vosotros dos murierais e Ichigo recuperase sus poderes de Shinigami después de vuestra muerte. Alguien debe haber roto el sello.
- Aparte de nosotros, sólo Ichigo puede entrar aquí - dijo Zangetsu.
- Y ninguno de nosotros lo ha liberado.
- Entonces, ¿Quién puede haber sido?
- Tengo una teoría, pero hay que preguntárselo a Isshin.
- ¿Qué teoría? - me preguntaron ambos.
- Pronto lo sabréis.
*Narra Yoruichi*
- ¿¡Estás completamente seguro de eso, Kisuke!?
- No del todo, pero es muy probable de que se trate de él.
- No puedo creer que siga vivo. Es muy peligroso que siga suelto.
- Si él e Ichigo se llegan a encontrar, lucharán y será un baño de sangre.
- De la sangre de Ichigo, supongo.
- Quién sabe. Kurosaki-San se esta haciendo muy fuerte. Quizá llega a igualarlo.
- Kisuke, debemos atraparlo antes de que se encuentren.
- Creo que eso será muy difícil. Ese chico es muy escurridizo. Lo realmente malo es no saber qué aspecto tiene ahora.
*Narra el tipo que atacó a Zennosuke*
- ¿Qué habeís averiguado sobre Kurosaki Ichigo? - nos preguntó nuestro jefe sentado en la oscuridad de nuestro escondite. Nunca le habíamos visto la cara, pero sí esos poderosos cuernos que tenia en la cabeza.
- No demasiado - le contesté, arrodillado ante él junto a mis subordinados -. Sólo sabemos dónde vive, quiénes son sus amigos y que ahora mismo está de vacaciones.
- Con esto es suficiente. Atacaremos cuando vuelva de las vacaciones. Le daremos un tiempo para relajarse antes de matarlo.
- ¡Sí jefe! - gritamos los tres a la vez.
