Este blog irá creciendo con las aportaciones de los lectores. Las personas que que quieran aportar algo que lo envíen a través de uno de estos mails: marbilltomgeorggustav@gmail.com marpuigca@hotmail.com
miércoles, 2 de mayo de 2012
El escuadrón fantasma - Capitulo 3
*Narra Rukia*
Ha pasado un mes desde la última vez que vi a Ichigo. Al final no estaba embarazada. Dejé de escuchar esa voz en mi cabeza desde que le dije que desapareciera. Renji da reportes falsos al Seiretei para que crean que realmente le estamos vigilando. Durante este mes he intentado ver a Ichigo un par de veces sin éxito. Urahara decía que no debía distraerle durante su entrenamiento. Renji y Kon me habían distraído durante todo ese mes. Se lo agradezco, pero hoy iré sola a buscar a Ichigo.
Llegué a la tienda de Urahara al amanecer. Entonces lo ví.
- ¡Urahara! ¡Cuidado! - grité y me lancé sobre ese hollow Vasto Lorde.
- ¡Rukia! - el hollow tiene la voz de Ichigo un poco modificada -. ¡Soy yo, Ichigo!
- ¡No mientas hollow!
Estava a punto de clavarle la katana al corazón cuando el hollow la cogió, la apartó y me abrazó.
- Siento haberte preocupado durante todo un mes. Lo siento. No volveré a dejarte sola.
La máscara empezó a romperse y pude verle la cara al hollow. Realmente era Ichigo.
- Sólo puedo aguantar tres minutos en esta forma por ahora.
- Tres minutos es suficiente - le dije antes de besarlo. No podía aguantar más sin sus besos. Y él tampoco.
- Espero estar invitado a la boda - dijo Urahara.
Ichigo y yo abrimos los ojos como platos y lo miramos. ¿Boda? ¿Qué boda? ¡Es demasiado pronto! ¡No puedo casarme aún!
- Si quieres una boda, tendrás que esperarte unos años - le dijo Ichigo.
- No creo que tenga que esperarme tanto después de lo que casi pasa.
Ichigo y yo volvimos a casa juntos. Ichigo iba en su forma de hollow. Iba a darles un susto a Kon, Karin y Renji, aunque este último ya había visto esa forma.
*Narra Renji*
- ¡Nee-san! ¡Nee-san! ¿¡Dónde está mi Nee-san! - lloraba Kon.
- Cállate - dijo Karin -. Ya volverá.
- Pobrecito, está muy triste - dijo Yuzu.
- ¡Uaah! - gritó de repente Kon -. ¡Un hollow! ¡Un terrorífico hollow!
Yo y Karin miramos hacia la puerta que llevaba al jardín y le vimos. Era un Vasto Lorde, pero yo conocía esa forma. Era Ichigo.
- ¿A qué esperas teniente? - me dijo Karin -. ¡Elimina a ese hollow!
- ¡No puedo! - le contesté.
- ¿Por qué no?
El hollow entró en la casa abriendo la puerta y se dirigió a mí:
- Renji, ¿Qué haces en mi casa?
- Pues... Nada...
- No mientas. Ya sé que te han elegido para ser el marido de Rukia.
- Ella me pidió que me quedara para cuidarla mientras no estabas.
- ¿Es eso cierto Rukia? - Ichigo se giró y miró hacia la ventana.
- Si, es cierto - le dijo Rukia -. Me sentía sola desde que te fuíste.
- Entiendo... Lo siento mi amor.
¿Cómo? ¿Mi amor? ¿¡Cómo te atreves a llamar a Rukia así!? Espera cerebro... ¡Ellos dos son novios! ¿¡Cómo pude olvidarme de algo así!?
*Narra Kon*
¿¡Ha llamado "mi amor" a mi Nee-san!? ¡Necesito una explicación para esto!
- ¿Qué significa esto Ichigo?
- ¿A que te refieres Kon? - Ichigo me miró. ¡Qué miedo daba con ese aspecto! Llevaba la capa del Bankai por encima de los hombros.
- Pues a... ¡A eso de llamar "mi amor" a mi Nee-san!
- Kon - me dijo mi hermosa Nee-san -, ¿No te dijimos que éramos novios?
- Pues... Un segundo, ¿¡Qué sois qué!?
- Novios Kon, novios.
- Parece que no se lo dijistéis - dijo el teniente.
- Nos olvidamos de él - dijo Ichigo antes de cogerme del cuello y arrastrarme al piso de arriba.
- ¡Hey Ichigo! ¿¡Adónde me llevas!? - le pregunté sin mirarlo a la cara.
- Arriba. Tienes que devolverme mi cuerpo.
*Narra Rukia*
Ichigo se llevó a Kon arriba aún en su forma de hollow.
- Parece que Ichigo está en plena forma - me dijo Renji.
- Si. Ha estado entrenando duro.
- Se ve muy bien que lo amas.
- Nii-sama no puede enterarse. Voy arriba a por mi gigai.
Subí a la habitación de Ichigo. Kon le estaba dando patadas con sus patas de peluche. Me metí en mi gigai, que estaba dentro del armario. Antes de que pudiera salir, Ichigo me cogió en brazos y me besó.
- ¿Cómo le diré esto a Kuchiki-Taicho? - dijo Renji, observándonos.
- No tiene por qué enterarse aún - le dijo Ichigo.
- Espero que no se le ocurra venir al mundo humano.
- No digas eso, que aún aparecerá.
- Ichi-Nii - dijo Karin apareciendo por detrás de Renji -. Hoy hay festival y Hanabi. Seguro que en un sótano no te habías enterado.
- Gracias por decírmelo Karin - le dijo Ichigo a su hermana y luego se dirigió a mi y a Renji -. ¿Tenéis kimono?
- Me lo traje de la Sociedad de las Almas por si acaso.
- ¿Rukia?
- Me lo olvidé - le contesté.
- Taicho me hizo traértelo - me dijo Renji -. Él sabía que te lo habías dejado.
- Arigatou Renji.
- ¿Podré ir yo? - nos preguntó Kon.
- Bueno, si Yuzu y Karin quieren llevarte con ellas... - le respondió Ichigo.
- Necesitará un kimono - dijo Karin -. Yuzu se encargará de ello - cogió el peluche y se fue.
*Narra Renji*
Ya ha llegado la noche. Ichigo y Rukia se habían pasado el día abrazados. Ahora estaba en el salón con Ichigo y su padre. Las chicas se estaban cambiando arriba mientras que nosotros ya íbamos en kimono.
- ¿De dónde habéis sacado esos kimonos negros? - les pregunté.
- Masaki nos los hizo hace tiempo - me dijo el padre de Ichigo.
- ¿Masaki?
- Mi madre - me contestó Ichigo.
- ¿Pero tu madre no...?
- Los hizo antes de morir.
- ¿Y cómo...?
- ¿Acertó mi talla? Ella tenía muy buena vista para estas cosas.
- Entiendo... Cómo me hubiera gustado tener una madre.
Ichigo me abrazó. Sabía como estaba sufriendo yo por dentro. Era algo que sólo Rukia había notado.
- Ichigo, tú...
- Perdí a mi madre cuando era pequeño, es normal que entienda qué es no tener madre.
- ¿Habéis terminado la escenita sentimental? - dijo Rukia apareciendo en el salón con las hermanas de Ichigo.
- Sí, ya está - dijo Ichigo mientras se secaba unas pocas lágrimas -. ¿Nos vamos?
*Narra Rukia*
Llegamos al festival. Nos separamos en dos grupos: los shinigamis y los Kurosaki. Ichigo iba con nosotros y Kon con los Kurosaki.
- ¡Cuántas cosas! - dije -. ¿Qué podemos hacer primero?
- ¿Qué quieres hacer? - me preguntó Ichigo.
- Hay muchas cosas, no sé qué elegir.
- Podemos hacerlo todo mi amor.
- ¡Kurosaki-kun! ¡Kuchiki-san! ¡Abarai-kun! - nos gritó alguien a lo lejos.
- ¡Inoue! - gritó Ichigo saludando.
Inoue se acercó corriendo. Detrás de ella estaban Ishida y Chad.
- Tiempo sin verte Kurosaki - dijo Ishida -.¿Dónde has estado?
- Entrenando - le contestó Ichigo.
- Ya...
- Kuchiki-san - me dijo Inoue -, tengo una pregunta que hacerte.
- ¿Qué pregunta? - le pregunté.
- Se rumorea que estás saliendo con alguien. Algunas chicas del Instituto te vieron con los dos, así que... ¿Con cuál de ellos dos estás saliendo?
- Pues... Me da vergüenza decirlo...
- Está... Saliendo conmigo Inoue - le dijo Ichigo.
- Me alegro por vosotros - dijo ella triste.
- Inoue - le dije -. No te preocupes. Seguro que encontrarás a alguien.
- Mira Renji, una parada de Taiyaki - dijo Ichigo.
- ¿Dónde? - le preguntó Renji mirando a todos lados.
- Allí - le señaló Ichigo y Renji se fue corriendo.
- Nosotros nos vamos - dijo Ishida -. No tenemos por qué soportarte.
- Yo tengo que ir a con unos familiares que vinieron desde México y que conocía muy poco - nos dijo Chad.
- Que vaya bien tu reunión familiar Chad - le dijo Ichigo.
Miré a mi alrededor y vi una parada interesante.
- ¡Inoue! ¡Inoue! - dije mientras tiraba de la manga -. ¡Vamos allí, a esa parada!
- ¿Eh? ¿A cuál?
- ¡La de los peces!
- Un momento chicas - nos dijo Ichigo -. Os pago las primeras rondas.
- Ichigo, ¿No te vas a...? - le pregunté pero me cortó negando con la cabeza.
- Todo lo qué tengo ahorrado era para gastarlo contigo, así que no importa. Voy a comprar un par de cosas, ahora vuelvo.
- No tardes demasiado.
- No. Tranquila. Cualquier cosa me llamáis al móvil.
- Vale.
Ichigo se fue y nos dejó solas pescando.
- ¿Cómo se usa esto? - le pregunté a Inoue al ver el hierro con la red de papel.
- Tienes que ponerlo en el agua e intentar coger el pez sin que la red se rompa - Inoue lo intentó con un hermoso pez blanco y negro y se le rompió la red -. És más complicado de lo que parece.
- No nos iremos de aquí hasta pescar cada una un pez.
- Vamos a gastar mucho dinero.
- Intentaremos hacerlo en los menores intentos posibles.
Me arremangué las mangas del kimono para empezar a pescar.
*Narra Ichigo*
Después de irme, empecé a buscar por todo el festival tres cosas muy concretas. Logré encontrarlas después de 15 minutos buscando.
- Perdone - le dije a ese señor -, ¿Me puede dar esos dos peluches y esas orejas de gato?
- ¿Qué orejas?
- Las rojas.
*Narra Renji*
Ya me había zampado tres taiyakis de tres sabores diferentes e iba para el cuarto cuando noté que alguien me ponía algo en la cabeza.
- ¿Pero qué...? - me giré e Ichigo me hizo una foto con su móvil.
- Mírate, pareces un gato con su pescado.
- Dios, es verdad. ¿Para qué son esos peluches?
- Ya lo verás... ¿Dónde dejé a las chicas?
- Pues ahora que lo dices, debemos habernos alejado mucho de ellas.
Se hizo el silencio mientras mirábamos a nuestro alrededor.
*Narra Rukia*
Habíamos conseguido pescar los peces qué queríamos y estábamos esperando a Ichigo un par de paradas más allá en la que hacían bolitas de pulpo.
- Inoue... - dije.
- Dime.
- ¿Quién te gusta?
- ¿Quieres saberlo? - dijo nerviosa -. No creo que debas saberlo, es demasiado embarazoso.
- Quiero saberlo. Somos amigas, ¿Verdad?
- Claro.
- ¿Y bien? ¿Es humano? ¿Shinigami? ¿Le conozco?
- Le conoces, es un Arrancar.
Casi escupí la bolita de pulpo que tenía en la boca. ¿Un Arrancar?
- ¿De qué Arrancar se trata? ¿Grimmjow quizás?
- No, Ulquiorra.
- ¿El qué te secuestró? ¿Cómo te enamoraste de él? ¡Cuenta!
- Empezó a gustarme después de que me llevara a Hueco Mundo. Allí ese sentimiento se fue intensificando ya que él siempre estaba allí. Kurosaki-kun no iba a matarle porqué se dio cuenta de lo yo sentía, pero su hollow interno le había dado tal paliza que no pude salvarle.
- Es una triste historia. ¿Por eso te has puesto triste cuando has sabido qué estábamos juntos?
- Me alegro por vosotros, pero todas las personas a las que amo se han ido de mi lado. Le vi una sonrisa a Ulquiorra antes de que desapareciera. Sólo eso me mantiene viva.
- Inoue, tus poderes pueden devolver al pasado algo que ya existe, ¿Has pensado en intentar reconstruir algo o alguien con una parte muy pequeña de esa cosa o persona? A lo mejor, si lo consigues, podrías tener a Ulquiorra de vuelta antes de lo que te imaginas.
- Kuchiki-san... Probaré a ver si es posible lo que dices y resucitaré a Ulquiorra. Pero tú tendrás que hacer algo a cambio.
- ¿El qué?
- Serás feliz con Kurosaki-kun.
- Eso no será difícil. Pero tú tendrás que dejar de llamarme "Kuchiki-san".
- Entonces... ¿Rukia-Chan?
- Me parece bien... Uhm... ¿Orihime-Chan? ¿Hime-Chan?
- Me gusta Hime-Chan.
- Entonces nos quedamos con Hime-Chan.
Echamos a reír las dos a la vez.
- ¿De qué os reís? - preguntó una mano qué cogió una de mis bolitas de pulpo. Alzamos la vista las dos y vimos que era Ichigo.
- ¡Ichigo! Has tardado mucho - le dije.
- Nos perdimos por el Festival - señaló detrás de si. Allí estaba Renji, comiendo Taiyaki como un gato y...
- ¿Cuándo le han crecido a Renji orejas de gato? - le pregunté a Ichigo.
- Es una diadema.
- Hace juego con su color de pelo - dijo Orihime -. Además parece un gato comiendo de esa forma.
- Si, es verdad - dijimos Ichigo y yo a la vez. Renji se había metido el Taiyaki entero en la boca y sólo se veía la cola.
- Tengo algo para vosotras - nos dijo Ichigo buscando en la bolsa que llevaba -. Este es para ti, Rukia.
- ¡Es un conejito! ¡Y se parece a Chappy! - dije feliz, cogiendo el peluche que Ichigo me daba.
- Sabía que te gustaría. Este es para ti, lnoue.
Orihime cogió el peluche y lo miró.
- Es un murciélago - dijo Orihime -. Y se parece a...
- Lo sé, por eso lo he cogido.
Orihime abrazó al murciélago y le dio un beso en la cabeza. Renji miró la escena extrañado.
- Parece que habéis pescado algo - nos dijo Ichigo.
- Sí - le contesté -. Lo hemos intentado muchas veces, pero al final lo hemos conseguido.
- La última vez que pesqué uno de éstos, mi madre aún estaba viva - Ichigo miró los peces con tristeza.
- Ichigo...
- ¿Cómo se llaman? - Ichigo hizo esa pregunta con una sonrisa en la cara.
- Éste es Ichigo - dije señalando al pez blanco y naranja -, y éste es Ulquiorra - señalé al pez blanco y negro de Inoue.
- Pues habrá que comprarles una buena pecera a los dos y... ¡Una novia!
Nos reímos los tres.
- ¿De qué os reís? - nos preguntó Renji.
- Nada, cosas nuestras - le contestó Ichigo -. Sigue mirando peces.
Renji volvió a mirar los peces y dijo:
- ¡Uno de rojo! ¡Lo capturaré cueste lo que cueste!
Nos reímos al ver que se le rompía la red y ponía cara de decepción y de perdedor.
*Narra Kon*
Iba por delante de las gemelas. Habían impedido que me metiera bajo los kimonos de las chicas varias veces. Ahora habían comprado una correa para llevarme atado.
- ¡Ichi-Nii! - gritó Karin, saludando.
- Hola - dijo Ichigo y me miró-. ¿Qué has hecho ya Kon?
- ¡Yo no he hecho nada! ¡Ellas me han atado! - le contesté.
- ¿Debajo de cuántas chicas se ha metido este pervertido?
- Debajo de 36 con kimono - le respondió su padre.
- 12 con falda - dijo Karin.
- Y 3 con uniforme - completó Yuzu.
- Sukebe - me dijo mi Nee-san. ¿Cómo podía decirme algo tan cruel?
- Será mejor que vayamos a buscar sitio - dijo el padre -. No tardarán en empezar el Hanabi.
- Si. ¿Vienes Inoue? - preguntó Ichigo a Inoue. Ella sólo asintió.
*Narra Renji*
Tuvimos suerte de encontrar un buen sitio y algo elevado. Ichigo y su familia iban todos los años a ese mismo sitio. Supongo que sería un sitio que tenían cómo reservado.
- Es un sitio hermoso - dijeron Inoue y Rukia.
- Lo sé - les dijo Ichigo -. A mi madre le gustaba mucho este sitio. Por eso siempre venimos aquí a verlo.
- ¡Ah! ¡Ya empieza! - gritó Karin mirando al cielo.
Nos acercamos a la valla de madera que había para evitar que te cayeras. Rukia se sentó en esa valla, Inoue abrazó a su peluche con más fuerza y cariño e Ichigo se sentó al lado de Rukia. Saqué la cámara. Algo me decía que tenía que fotografiarlos en un momento muy concreto. En ese instante, Ichigo besó a Rukia y alguien lanzó un petardo qué estalló en forma de corazón. Hice la foto en el momento justo, mientras ellos dos es besaban y ese corazón rojo brillaba en el cielo. ¡Quedó perfecta!
- ¿Qué estás haciendo Renji? - me preguntó Ichigo.
- Luego te lo enseño. Os va a gustar a los dos - le respondí.
- Eso espero - me dijo Rukia.
Sonreí. Ellos dos se rieron. Ichigo abrazó a Rukia y la besó. Lo siento, Kuchiki-Taicho. No puedo cumplir su petición. Su amor es demasiado fuerte. Serán más felices ellos dos juntos que Rukia y yo. A partir de ahora los ayudaré en lo qué pueda. Protegeré su relación y ni siquiera usted los podrá separar, Taicho.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Que bonito me estoy imaginando la escenas, con todos los tenderetes de un matsuri(festival en japones) ademas con takoyaki que son las bolitas de pulpo *_* A ver que ara ahora Kuchiki-taicho! Kon simpre sera igual! Ya quiero leer la siguiente !! Podria volver ulquiorra? :O
ResponderEliminarLeyendo este capitulo me he acordado de el Hanabi Daika (Los que yo vi y los que dicen que son los mas grandes) Quiero volver a verlos!!!!
A ver para cuando el siguiente capitulo, al final habra que hacer un pequeño apartado al final de cada capitulo explicando en pequeñas frases cosas que ocurriran en el siguiente capitulo :D
Impresionante la forma de redactar!! muy interesante ,te puedes creer que al leerla la podia ver dibujada?espero el proximo capitulo
ResponderEliminarawwww que lindo renji!!!! :D
ResponderEliminarme dieron ganas de tener un pez .-.
jajajaja muy lindo el cap
e.e me imagine a renji con orejas XD
me encanto! quiero un pez, pero en mi casa todos se me mueren :(
ResponderEliminarme gustó mucho lo de inoue con ulquiorra ♥